M3U1 Reflexión sobre la práctica docente y los aspectos de mejora

Propósito
Reflexionar sobre la importancia de la mejora profesional como elemento fundamental
para la toma de decisiones en el trabajo pedagógico.

Mejora profesional en el ámbito de la educación básica.


Hoy en día la profesionalización de todo docente es fundamental ya que el papel del mismo sigue
siendo fundamental en lo que atañe a la calidad y la pertinencia de la educación, y el no quedarse rezagado se vuelve una estrategia indispensable para estar a la par con lo que el mundo exige.
A lo largo de los años en las escuelas se observa que la mayoría de los docentes principalmente en los que tienen mayor número de años de servicio, suelen entrar a un estado de confort en el cual creen que lo que hacen está bien y que los años de servicio les dan los conocimientos y las herramientas necesarias para el desempeño de su función, y que los temas de capacitación y actualización solo son temas de interés para docentes de nuevo ingreso y para los docentes jóvenes, sin embargo los resultados de las evaluaciones estandarizadas muestran la realidad de la educación que reciben los alumnos en donde se observa que los niveles de aprovechamiento del alumnado está por debajo de la media nacional, lo que pone de manifiesto que el tema de la profesionalización es en la actualidad base para mejorar la calidad educativa que nuestra sociedad exige y demanda.
El discurso de la profesionalización no es nuevo, se encuentra estrechamente ligado a la crisis del sistema educativo y a la mejora de la calidad de la educación, especialmente a partir de la reforma educativa implementada en el 2006. Por ello se cree que para garantizar la calidad de la educación, se requiere que los docentes del sistema actúen profesionalmente.
Como dice Tenti Fanfani, “la profesionalización se convierte en la llave maestra del mejoramiento de la calidad de la educación” (Tenti Fanfani, 1995).
Darling-Hammond (2005, 375) señala que…la profesionalización no constituye el estado final al que se encaminan las ocupaciones, sino que es más bien un proceso continuo en persecución de un ejercicio útil y responsable de la misma. Esta idea de proceso, alejada del concepto tradicional y clásico de comparación con las profesiones más valoradas socialmente (abogacía, medicina, etc.), reclama una atención hacia aspectos del desarrollo profesional de los docentes. Como adultos inmersos en la sociedad del conocimiento, mas allá del rol tradicional de transmisores de contenidos, se demanda que los profesores actúen como guías del conocimiento de sus alumnos, como orientadores del proceso de aprendizaje. Como nos indica Pérez Gómez, (1998):

“Bien lejos del concepto clásico de profesionalidad docente como posesión individual del conocimiento experto y el dominio de habilidades, la práctica profesional del docente es, a mi entender, un proceso de acción y reflexión cooperativa, de indagación y experimentación, donde el profesor aprende al enseñar y enseña porque aprende, interviene para facilitar y no imponer ni sustituir la comprensión de los alumnos, y al reflexionar sobre su intervención ejerce y desarrolla su propia comprensión (198).

Un aspecto interesante de la profesionalización, como nos recuerdan Zeichner y Noffke, (2001) tiene que ver con su relación con la investigación de los profesores. Nos advierten que si la profesión docente, en las escuelas de primaria y secundaria, quiere abandonar la infancia y hacerse adulta como profesión, los profesores necesitan asumir la responsabilidad adulta de investigar, de forma sistemática y crítica, su propia práctica.
Es importante tener como una prioridad, la capacitación y actualización de los docentes en el manejo y uso de las tecnologías de la información y la comunicación, porque posteriormente, éstas serán las herramientas que faciliten su labor educativa.
En ese sentido puede considerarse que las TIC pueden asumir el papel de apoyos didácticos en una clase presencial, haciendo más amena e interesante la adquisición de conocimientos, aún dentro del marco tradicional.
Los avances tecnológicos aplicados a la educación han hecho necesaria la actualización de los docentes en servicio en ese campo, con la finalidad de que éstos obtengan la capacidad de aplicar nuevas metodologías y recursos didácticos que faciliten el aprendizaje razonado y continuo de los contenidos. Para ello los docentes, en primera instancia, han de conocer cuáles serán los materiales de comunicación con los que han de trabajar y cómo han de manejarlos, desde el punto de vista material, lo que a su vez enseñará a sus alumnos y así estar ya en posibilidad de aprovechar dichos medios en el proceso enseñanza-aprendizaje.